El alcalde electo de Jiutepec, Rafael Reyes Reyes, advirtió que la actual administración contrató en el Ayuntamiento a personal para su campaña política y que ahora inició una cascada de despidos de alrededor de 800 personas, con promesa de pago al mes de diciembre.
Lo anterior, con el fin de heredar un problema laboral y financiero a su gestión, según señaló Reyes Reyes, al tiempo de aseverar que se harán auditorías al municipio y que se procederá conforme a derecho.
También llamó a los despedidos a recurrir ante la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (FEPADE), al referir que se incurrió en un muy probable delito electoral.
El futuro edil apuntó que con estos actos, Manuel Agüero Tovar daña a la ciudadanía, porque esos laudos provocados sólo afectan la posibilidad de obras y servicios para la población.
Calificó como un berrinche el aumento en el cobro de la recolección de basura y afirmó que habrán de dar seguimiento a la denuncia sobre el elevado gasto de campaña, que sin duda rebasa los topes, ya que el origen de ese dinero podría ser del erario público, según anotó.