Alrededor de un millar de personas laboran como "empleados de confianza" en el sector central del gobierno del estado, y podrían ser removidos por la próxima gestión.
Al respecto, el secretario de Administración, Fernando Solís Godínez, indicó que no se les puede pedir renuncias porque ellos están en su derecho de decidir si personalmente otorgan este documento o reservan sus garantías laborales.
Por otra parte, el funcionario estatal reveló que los contratos, entre ellos el de subarrendamiemto de patrullas, concluyen el 30 de septiembre y por lo tanto, si el siguiente gobierno no realiza los procesos de renovación o nueva contratación, la entidad se quedaría sin esos vehículos.
Sobre el tema de las renuncias, Solís Godínez comentó que hay 21 funcionarios que son nombrados directamente por el titular del Poder Ejecutivo en turno; se esperaría que dichos funcionarios -secretarios y colaboradores más cercanos- entreguen la renuncia a partir del 1 de octubre.