El titular de la Fiscalía General del Estado (FGE), Uriel Carmona Gándara, anunció la detención de uno de los dos presuntos homicidas del activista de la comunidad lésbico, gay, bisexual y trans (LGBT+), Javier Eduardo Pérez Hidalgo, cuyo cuerpo fue localizado el 19 de agosto de 2020 en el poblado de Acapantzingo.
A través de una conferencia de prensa virtual, el fiscal estatal informó que, después de varios meses de investigación, la Fiscalía Regional Metropolitana identificó a atacantes de la víctima, quien era arquitecto de profesión y que, debido a la crisis económica provocada por la pandemia del covid-19, laboraba como chofer de transporte privado por aplicación.
De acuerdo con datos que obran en la investigación, Javier Eduardo, de 34 años, residía en la capital del país, tenía familiares en Morelos y, la madruga del 19 de agosto, convivió con dos hombres en un departamento de la colonia Club de Golf de Cuernavaca, donde habría sido atacado, privado de la vida por asfixia mecánica y su cuerpo envuelto en una sábana, para después ser abandonado e incendiado en un paraje del poblado de Acapantzingo, donde también se encontró un cartón con un mensaje despectivo.
Las pesquisas lograron ubicar a uno de los presuntos homicidas, identificado como Juan Bernardino “N”, quien fue detenido en la colonia Villa de Nuestra Señora de la Asunción, ubicada en la capital del estado de Aguascalientes, en colaboración con las autoridades de esa entidad.
El hombre fue trasladado a Morelos, donde fue puesto a disposición e imputado ante un juez de control por el presunto delito de homicidio calificado. Ayer mismo, el juez de control resolvió vincular a proceso a Juan Bernardino “N” por el presunto delito de homicidio calificado, mantuvo la medida cautelar de prisión preventiva y otorgó a la representación social un plazo de cuatro meses para el cierre de la investigación complementaria.
Hasta el momento, la FGE sostiene la hipótesis de que el asesinato del activista se trató de un crimen de odio.