Asegura que hay cobros exagerados y cortes de energía indebidos.

Integrantes de la Asamblea Nacional de Usuarios de Energía Eléctrica (ANUEE) protestaron nuevamente este lunes frente a las oficinas de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) que se ubican en la calle Degollado del centro de Cuernavaca, ante los cortes de suministro que aseguran haber sufrido en sus hogares. 

Los inconformes reclamaron que los cobros excesivos no paran y constantemente se "brincan" a la siguiente tarifa más alta, por un supuesto incremento en el rango de consumo, cuando ni siquiera -afirman- toman la lectura de los medidores mientras el consumo de energía en los domicilios afectados ha sido el usual. 

De igual modo señalaron que los aumentos de enero a la fecha reflejados en los recibos de cobro se incrementan más del 50 por ciento de un bimestre a otro. Lo anterior, sin dejar de mencionar lo que llamaron “recibos locos”, que llagan a los usuarios con cantidades estratosféricas que superan los miles de pesos por el consumo de una vivienda normal.    

Insistieron en que la CFE sigue con los abusos a pesar de los recursos iniciados ante la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).  

“Ya es acoso, hacen cortes, nosotros presentamos quejas a Profeco, y luego nos acusan de robo de la luz. De acuerdo con el artículo 113 de la Ley Federal de la Profeco, no deben cortar los suministros hasta que se desahoguen los recursos de inconformidad. Pero la CFE va y retira medidores, corta cables y todo esto haciendo uso de gente contratista, sin preparación para atendernos en nuestro domicilio. Esa gente, si no nos corta la luz, no gana dinero. Por eso se porta grosera y hasta violenta”, aseveró el coordinador de ANUEE en el estado, Jorge Vargas Delgadillo. 

Los manifestantes advirtieron que no dejarán el camino de la movilización hasta que se detengan dichos actos de abuso, que podrían tener otras consecuencias más delicadas -dijo- si la CFE sigue por el mismo camino. Destacaron que son una organización pacífica, pero insistieron en que el personal que acude a realizar los cortes asume constantemente una postura de agresión y provocación.