Se prohibirá la venta de bebidas alcohólicas, confirma el alcalde.
El alcalde de Cuernavaca, José Luis Urióstegui Salgado, confirmó que la Feria de Tlaltenango se llevará a cabo porque es un derecho del poblado, a pesar de la inconformidad de un sector de la población por el tráfico que ocasiona el cierre de la avenida Emiliano Zapata.
En este sentido, el edil capitalino pidió a la población ser compatibles, pues sólo son diez días de cierre de los 365 que tiene el año.
La noche del 30 de agosto se cerrará la avenida Emiliano Zapata para la instalación de puestos y se desmonta la noche del 10 de septiembre.
"Se va a llevar a cabo. No hay cambios", sostuvo Urióstegui Salgado, y se pronunció por mantener nuestras raíces y costumbres.
"Cada quien es digno de reconocerse en sus creencias y derechos, y frente al derecho de alguien hay el derecho de otra persona, y es el derecho de un pueblo", precisó.
Agregó que la comunidad no sólo es la gente que vive en Tlaltenango, sino que se considera a otras personas fieles a la Virgen de los Milagros, que la visitan cada año.
El presidente municipal afirmó que se prohibirá la venta de bebidas embriagantes, porque se trata de una convivencia familiar.
De igual manera, aseguró que se dará prioridad al comercio local en la instalación de puestos, aunque también hay apertura para comerciantes de otros estados.