El funcionario agregó que los derrames de hidrocarburo provocados por tomas clandestinas en los ductos de Pemex, como los que se han encontrado en los últimos días, son un riesgo constante y cada vez un delito más recurrente que pone en riesgo a los ciudadanos por la gran presión de las fugas, mismas que además de los derrames provocan contaminación del aire.
Urióstegui Álvarez refirió que "desafortunadamente el trayecto del ducto de Pemex del Distrito Federal a Cuernavaca es muy amplio, entonces es mucho tiempo para realizar el recorrido".
Cabe recordar que a fin de recibir denuncias anónimas respecto a tomas clandestinas o derrames, Petróleos Mexicanos ha puesto a disposición de la ciudadanía el número de teléfono gratuito 01 800 228 96 60, a fin de realizar reportes de este tipo de ilícitos que no sólo atentan contra el medio ambiente sino que también ponen en peligro a las comunidades.