Al respecto, Arroyo Cruz informó que "no existe ningún tercer dictamen pericial", al tiempo de señalar que lo que se anexó es una "ampliación del primer dictamen hecho de aquella primera opinión que nosotros tachamos de viciada".
También anotó que de forma ilegal se agregó ante la Fiscalía General del Estado (FGE) dicha ampliación al primer dictamen.
Consideró que el dictamen ofrecido por el perito, Carlos Francisco Jiménez del Prado, que afirmaba que la firma sí había sido puesta de puño y letra del alcalde está viciado de origen, toda vez que no realizó ninguna prueba caligráfica, por lo que responsabilizó al perito y a la encargada de la carpeta de investigación de presuntos actos de corrupción.
Dijo que confían en la institución, pero no en las personas que realizan la investigación.
Advirtió, sin embargo, que continuarán integrando la carpeta de investigación hasta las últimas consecuencias.
Por su parte, Blanco Bravo apuntó que seguirá al frente de la administración y manifestó que la política es muy complicada, pero continuará hasta las últimas consecuencias.
"Esa no es mi firma, lo juro por mis hijos (...) estoy encabronado porque hay actores intelectuales que no quieren que le vaya bien a Cuernavaca. Le pido a los ciudadanos que me apoyen porque soy una persona trabajadora y honesta. Quieren que me vaya mal, porque hay muchos intereses de por medio", aseveró el edil.
-Imagen: Job Vera.-