La mayor parte de éstos prefieren estar en el mundo de la informalidad debido al exceso de trámites y reglamentos municipales “prácticamente imposibles de cumplir” y a la casi nula información que se les brinda para cumplir con sus obligaciones tributarias.
Agrupaciones de comerciantes y prestadores de servicios, como el Consejo Empresarial de Cuautla y la Región Oriente del Estado de Morelos, a través de su dirigente, Miguel Leana Vélez, se pronuncian por una simplificación administrativa que permita a los emprendedores salir de la clandestinidad y cumplir con la ley.
Dicha simplificación administrativa debe ir acompañada de mecanismos de transparencia y de una readecuación de la Ley de Ingresos “para no sangrar más a los comerciantes”, pues aseguró que con los múltiples reglamentos aprobados por el actual cabildo sólo se está propiciando el cierre de establecimientos, fomentando la evasión fiscal y el desvío de recursos económicos.
Ante la competencia desleal de los comerciantes establecidos que no están pagando tributaciones, el Consejo Empresarial de Cuautla y la Región Oriente del Estado de Morelos ha establecido un acuerdo con el ayuntamiento a fin de poner en marcha un Programa Temporal de Regularización para la Expedición de Licencias de Funcionamiento, Refrendos y Horas Extras.
“Definitivamente, todos los comercios –giros blancos, giros rojos, como los quieran llamar– tienen la obligación de tener una licencia de funcionamiento, que no es más que el registro municipal de trabajo o de servicios. Esto ha traído como consecuencia que ante el exceso de reglamentaciones no puedan cumplir y finalmente se van a la informalidad”, reiteró.
Manifestó que este programa también permitirá combatir prácticas de corrupción “porque si logramos una simplificación, la mayor parte de la gente va a cumplir en tiempo y forma y eso, como consecuencia, finalmente va también a favorecer de manera económica al ayuntamiento y al propio compañero, ya que ellos mismos son víctimas de que ‘pasan la charola’ algunos malos funcionarios, algunos malos trabajadores y los mantienen a cuota mes a mes y eso, lejos de beneficiar, es en perjuicio tanto del ayuntamiento como de los propios comerciantes”, enfatizó.