De acuerdo con el coordinador de Panteones, René Trejo Espinoza, se calcula que sea un millón de pesos el que se deba invertir, de ahí que "estamos trabajando para que al menos se pueda arreglar un poco este lugar, ya que no se cuenta con la debida autorización. Sin embargo esperamos que para el 2 de noviembre ya esté todo listo, por lo pronto está cerrado el acceso por la parte principal", apuntó.
Ante estas circunstancias y con la intención de evitar problemas a la integridad de la población, es que “se resguardó el área afectada”.
Y añadió: "es un construcción muy antigua, por lo que el INAH tiene cierta responsabilidad de tenerla bajo resguardo y por esa razón se necesita que se trabaje con material especial, de acuerdo a las condiciones en la que se encuentre dicha zona".
Asimismo, sostuvo que "sí, se está trabajando para dar otra solución, pues es necesario que este arquillo esté en buen estado, pues es la misma gente la que pide que se rehabilite, para seguridad de ellos a la hora de visitar a su fieles difuntos. Ante lo expuesto, se estará viendo la forma de colocar una estructura para resguardar la losa pero sin tocarla, para que este 2 de noviembre puedan los visitantes circular sin ningún riesgo".