Los extrabajadores municipal culpan al alcalde Antonio Domínguez Aragón de la provocación.
Ayala.- La tarde de este jueves, el Ayuntamiento llevó a cabo el desalojo de los extrabajadores despedidos que mantenían tomadas las oficinas del Registro Civil, provocando un conato de enfrentamiento que terminó con un intento por quemar las oficinas del Registro Civil.
Lo anterior ocurrió alrededor de las 17:00 horas cuando al lugar de la manifestación, ubicado a un costado del mercado municipal y del corral de toros, llegó un grupo de provocadores enviados por el presidente municipal Antonio Domínguez Aragón, los cuales intentaron ingresar por la parte de atrás de las oficinas, para lo cual empezaron a hacer un hoyo en la pared, denunciaron los manifestantes.
Los extrabajadores llevaban cuatro días en plantón permanente para exigir al presidente municipal el pago de sus indemnizaciones por el despido injustificado, derivado de la derrota de su esposa quien contendió en las elecciones para presidenta municipal. El edil acusó a los trabajadores de no haber votado por ella, razón por la que tomó represalias quitándoles el trabajo.
En el grupo de choque enviado por el alcalde a provocar a los manifestantes, se encontraban algunos comerciantes del mercado, quienes facilitaron la entrada por la parte trasera para que pudieran romper la pared y poder ingresar al lugar donde están los archivos.
Al verse atacados, los manifestantes trataron de defenderse mientras huían dejando en el interior de la oficina al grupo de golpeadores quienes prendieron fuego a las oficinas para responsabilizar a los extrabajadores.
En la refriega Ismael Castro Sánchez aseguró que fue atacado con agua caliente y piedras. Él fue el albañil contratado por el alcalde Antonio Domínguez para hacer el boquete en la pared para así allanar las oficinas del Registro Civil. “Me aventaron agua caliente, me aventaron piedras, les comenté que yo solo venía a trabajar. Estaba yo en la iglesia y me llamaron para venir acá, eran como 30. Yo tengo una familia que mantener y la verdad no tenía trabajo desde hace dos semanas y me pidieron venir aquí”, señaló.
Al lugar arribaron elementos de seguridad pública y bomberos para sofocar las llamas, mientras que los manifestantes se habían ido del lugar para evitar una confrontación mayor, pues desde la mañana el alcalde ya había manifestado su intención de desalojarlos enviando a elementos de seguridad quienes finalmente no actuaron.