Luego de un recorrido por el lugar, se pudo apreciar que el municipio de Cuautla es el menos beneficiado con el mal llamado relleno sanitario, que fue construido con los impuestos de los cuautlenses, pues hay veces que no llega a 400 toneladas de basura las que deposita por deficiencias en el servicio de recolección y limpia.
En respuesta a una denuncia vecinal, se realizó una visita al tiradero donde es evidente el abandono en el que se encuentra, pues sus instalaciones están más deterioradas que cuando estaba a cargo del Ayuntamiento de Cuautla. Lo anterior, pese a que ahora es la empresa Domos la encargada de cobrar por la basura que otros municipios tiran en ese lugar.
A finales del mes de octubre, durante el banderazo de inicio “de los trabajos de remediación del basurero municipal”, que estuvo a cargo del presidente municipal y su cabildo, se informó que la empresa concesionaria realizaría trabajos que incluyen el diseño, construcción y operación del relleno sanitario bajo la normatividad ambiental vigente; asimismo, que con dichos trabajos el lugar sería dotado de cercado perimetral, camino de acceso, oficinas administrativas y operativas, báscula, comedor, baños, caseta de vigilancia, control de acceso, cobertizo-taller, cisternas, señalización, área de emergencia, almacén de residuos peligrosos y la cubierta final.
De todo lo anterior no hay evidencias, pues el lugar se encuentra igual que cuando la operaba la empresa encargada de su “regularización”. Es más, tampoco se pudo apreciar ningún tipo de maquinaria ni vehículos propiedad de la empresa Domos que estuvieran trabajando.
Mientras tanto, la información acerca de los jugosos ingresos que se registran en el lugar nadie los proporciona, al mismo tiempo que la contaminación ambiental del aire y el subsuelo continúa sin control ni vigilancia, agravada por las 18 mil toneladas que al mes viene a tirar el municipio de Cuernavaca mediante 20 tractocamiones que a diario hacen fila para entrar al lugar.