Asimismo, amenazan con volver a invadir el zócalo de la ciudad, ante la discriminación de la que son objeto. Renuentes a dar su nombre, los inconformes aseguran que los operativos sólo están enfocados en contra de los ambulantes que se niegan a pagar derecho de piso a algunas lideresas, por lo que no descartan una ocupación masiva de las vías de comunicación.
Dijeron que las autoridades municipales no molestan a los ambulantes que son protegidos o son familiares de la señora Guadalupe Farelas. “Ellos sí pueden agarrar los mejores lugares; si se fija, ellos agarran las mejores esquinas, venden aguas, frutas, globos, tacos y están aquí, en el centro, desde la Alameda hasta donde empieza el zócalo”, afirman.
Por ello empezaron a instalarse paulatinamente en la avenida Galeana, ocupando parte de las banquetas y los espacios entre los vehículos estacionados. Esto pone en peligro la integridad de los peatones, sobre todo de los niños y estudiantes quienes tienen que “torear” a los ambulantes y los vehículos, al verse obligados a caminar en el arroyo vehicular.
A pesar del riesgo, ni la Dirección de Transito Municipal, ni la de Inspección Fiscal han hecho algo por regularizar la vialidad ni el comercio en el primer cuadro de la ciudad.