Lo anterior depende del dictamen que la dependencia federal deberá emitir después de analizar los estudios realizados a la contaminación que produce el tiradero, el cual sigue recibiendo un promedio de 9 mil toneladas de basura al día, la mayor parte proveniente del municipio de Cuernavaca.
Al mismo tiempo, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) también realizará estudios acerca de la contaminación que se ha agravado en este centro de confinamiento de basura. Lo anterior fue confirmado por el regidor de la Comisión de Desarrollo Agropecuario, uno de los pocos que ha seguido de cerca el mal manejo del pretendido relleno sanitario de Cuautla.
“Hace dos semanas tuvimos por ahí verificando a personal por parte de la UNAM, que estuvieron haciendo un análisis del ambiente, así como de lixiviados. Quisimos investigar más a fondo; tuvimos contacto con la Profepa, estuvo aquí, hizo sus trabajos, recorrimos las barrancas, toda la periferia que es del relleno sanitario, y se le comentó también que la UNAM había hecho estos mismos análisis”, señaló.
Derivado de dicho estudio, dijo, la Profepa dio un plazo de cinco días para acabar con la regularización del basurero, pero la empresa que actualmente administra el lugar pidió 10. “La Profepa se acaba de retirar del relleno, acabo de estar allá; también vino a tomar muestras de lixiviados y del ambiente para hacer un comparativo con los que va a mostrar la UNAM, y de esto hablan de cinco a 10 días para dar un dictamen. Si el dictamen dice que los lixiviados tienen alta contaminación y son corrosivos, el relleno se clausura”, aseguró.
El regidor manifestó que en caso de clausura se apoyará la medida hasta que se cumpla totalmente con la Norma Ecológica 083, pues no es posible que se continúe “manoseando” el basurero municipal sólo con fines de lucro, en perjuicio de la población y la agricultura que padecen los estragos de la contaminación que produce.