Por otra parte, el Partido Acción Nacional y los partidos de izquierda (Partido de la Revolución Democrática, Partido del Trabajo y Movimiento Ciudadano) impugnaron la distribución de las 12 diputaciones locales por la vía plurinominal, y se refutaron los resultados de 13 diputaciones locales y 13 municipios. Comprensible todo ello, un espacio más o uno menos en la próxima Legislatura del Congreso del Estado, pueden ser determinantes para la hora de la toma de decisiones.

En total ha informado el Instituto Estatal Electoral (IEE) que ha recibido 60 impugnaciones de distintas fuerzas políticas.

Una vez cumplido el análisis por parte del IEE, independientemente del sentido de las resoluciones, entrará en acción el Tribunal Electoral del Poder Judicial del Estado de Morelos. Fernando Blumenkron Escobar, su magistrado presidente, asegura que sus compañeros Hertino Avilés Albavera y Carlos Alberto Puig Hernández, así como el equipo de apoyo, están listos para cumplir en tiempo y forma con su responsabilidad. La parte presupuestal, es decir, la suficiencia económica también está garantizada.

Existe un importante antecedente que hace confiar a los morelenses en esta institución: en un alto porcentaje son ratificadas sus sentencias por la instancia federal.

Las leyes electorales parecen de fácil comprensión, sin embargo en su interpretación basada en la doctrina, fundamentos, principios y en el razonamiento de magistrados, se emiten resoluciones o sentencias, en su caso, debatibles, pero en la etapa final inatacables. Nuestra democracia se ha visto fortalecida precisamente porque al final del camino hay certeza y debe cumplirse lo resuelto.

Los movimientos sociales que de forma espontánea o manipulados se gestan tras un proceso como los recién vividos en el ámbito estatal y nacional, todavía son una muestra de considerar que el empuje o peso político puede imponerse a lo jurídico. Ante ello, y creemos se ha demostrado, los magistrados locales y federales han sabido manejarse con oídos sordos, concentrados en sus análisis y bajo la consigna de su gigantesca responsabilidad para el destino del país.

Es de recordarse que el proceso electoral no culmina hasta en tanto no quede resuelta la última impugnación. A nivel país y estado la autoridad competente debe actuar y esforzarse por resolver expedientes y proceder a la calificación de elecciones, resolver casos en lo particular y otorgarle a México el resultado definitivo sobre los vencedores de las contiendas, la distribución de sus representantes y con ello la confianza en sus autoridades.

En el tema para gobernador el último día de septiembre a más tardar, habrá de resolverse; para el tema de diputados el final de agosto es la fecha perentoria. Para el caso de munícipes podrán sufrirla hasta la recepción del año nuevo.

El caso es que Morelos y México viven la etapa poselectoral con todo auge y nada alejado de lo que se preveía. Quienes resultan derrotados siempre han de buscar la oportunidad última de alcanzar un mejor resultado, a fin de cuentas lo que está en juego, es para ellos en lo individual trabajo, dinero, presencia y poder. Para el país es su destino inmediato.