De acuerdo con el titular de la oficina, Jesús Hernández Mendoza, “estas acciones son con el objetivo de mantener informada a la ciudadanía respecto a la actividad del coloso y evitar falsas alarmas, así como orientarlos respecto a cómo actuar en caso de una contingencia mayor derivada del incremento en la actividad volcánica”.
Para ello, el Instituto Estatal de Protección Civil “ha llevado a cabo la distribución de trípticos a la población en general, centros educativos y oficinas gubernamentales, a través de los cuales se les da a conocer las fases de alerta volcánica, además de información que permita a la ciudadanía tomar las debidas precauciones”.
De igual forma, el funcionario sostuvo que se pretende “que las familias que se ubican en la zona de riesgo del volcán, las que se estima un total de 20 mil personas, realicen su propio plan familiar de Protección Civil, mantengan ubicables documentos personales, determinen sitios de encuentro y se estén atentos de las recomendaciones emitidas por las autoridades de la materia”.
Las unidades municipales de Protección Civil también reciben información constante sobre los niveles de actividad del volcán.
En tanto, el Cenapred mantiene un monitoreo de 24 horas al volcán, a fin de mantener informada a las dependencias de Protección Civil y que se determinen los procedimientos preventivos.