Sobre lo ocurrido en Tlalnepantla, el funcionario rechazó que el alcalde Fausto Rubio Pillado hubiera sido agredido físicamente, y atribuyó los hechos a "un resbalón, y la gente lo tomó como que fue un golpeteo; no hubo tal cosa, la gente se condujo con respeto con el presidente municipal y de esta manera también nos atendieron a nosotros", dijo quien estuviera presente en el lugar para dialogar con los habitantes y lograr la liberación de los empleados municipales que estaban siendo retenidos.
De acuerdo al director del IDEFOMM, Tlalnepantla no ha podido hacer frente a los compromisos sociales con la población debido a la falta de recursos, con factores como la falta de respuesta a la petición de los familiares de una funcionaria que fue asesinada el año pasado, quienes hoy piden que el gobierno local termine de pagar los gastos funerarios y cubra la indemnización correspondiente.