Hasta el momento se ha puesto al descubierto una longitud de cerca de 10 metros y debido a sus condiciones y el lugar en que se encuentra, la arqueóloga Ivonne Giles, propuso que este sea cubierto nuevamente y se dé cuenta de su existencia.
“Nosotros lo que hemos propuesto es que se lleve el registro arqueológico, pero que el espacio sea tapado, porque abrirlo para su exposición es muy difícil, pues pasa por uno de los pasillos que tendrá este espacio”.
Y agregó que “la opción más factible es cubrir el muro y continuar con la recuperación de la plaza, que busca devolverle su aspecto original, en lugar de convertirlo en un atractivo para el público, ya que obstaculizaría el tránsito de vehículos y peatones”.
Dejó abierta la posibilidad de que hacia adelante, alguna parte del muro pudiera quedar al descubierto, pero ello dependerá del sitio en que se ubique.
Dicho muro, construido a finales del siglo XIX, pudo haber sido colocado junto con la construcción de la estación interoceánica, la cual es considerada un monumento histórico.
Por ello, integrantes del Consejo del Patrimonio Histórico de Cuautla, encabezados por su vicepresidente Jaime Martínez Rivera, realizaron un recorrido y supervisión en la zona donde se encuentra el muro.