La mañana de este jueves Estados Unidos lanzó una bomba sobre Afganistán en un ataque contra el Estado Islámico. El artefacto no tenía potencia nuclear, sin embargo, es el arma más poderosa de su tipo que está en posesión del ejército estadounidense. La bomba es conocida técnicamente como Massive Ordnance Air Blasto (MOAB), cuyas siglas equivalen también al apelativo de “Mother of all bombs” o la “Madre de todas las bombas”.
Esta arma fue desarrollada por la Fuerza Aérea de Estados Unidos en 2002, durante la guerra contra Irak, pero el ejército estadounidense nunca la utilizó. En ese momento era considerada la bomba no nuclear más potente de todas, hasta que en 2007 los rusos crearon una bomba que apodaron el “Padre de todas las bombas”.
La MOAB mide 9.18 metros, tiene un diámetro de 1.03 metros y pesa más de 10 toneladas. El artefacto contiene 8.5 kilogramos de material explosivo y su estallido es equivalente a 11 toneladas de dinamita, con un radio de explosión de casi 1.5 kilómetros.
La MOAB mide 9.18 metros, tiene un diámetro de 1.03 metros y pesa más de 10 toneladas. (Foto: CreatedThing)
Debido a su tamaño, la bomba es lanzada desde un enorme avión Hércules C-130, tiene un paracaídas para deslizarse fuera de la rampa de carga y es guiada por un sistema de posicionamiento global para ser lanzada con mayor precisión. Además, está diseñada para acabar con blancos denominados “suaves”, no para estructuras reforzadas como, por ejemplo, un búnker.
Algunos expertos en temas bélicos consideran esta bomba como una sucesora de la BLU-82 (conocida como Daisy Cutter), la cual fue usada durante la guerra de Vietnam. Pero esta es la primera vez que MOAB es utilizada en un conflicto, antes sólo se habían hecho un par de pruebas y, en verdad, verla explotar es absolutamente aterrador.