Empresas españolas cooperarán con el gobierno mexicano para apoyar en la rehabilitación de México después de los terremotos del 2017
España y México presentaron en Madrid la Alianza para la Rehabilitación post-terremotos, una iniciativa de la cooperación española destinada a paliar los daños provocados por los terremotos que tuvieron lugar en septiembre de 2017 en tierras mexicanas.
El objetivo de la Alianza es involucrar a las empresas privadas en el esfuerzo de la cooperación española y del gobierno mexicano, informó la Agencia Española de Cooperación (AECID) en un comunicado.
La iniciativa se enmarca en el Fondo Mixto de Cooperación España-México, una plataforma destinada a la conformación de alianzas para apoyar, entre las instituciones de cooperación de ambos países, el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible definidos por la Agenda 2030.
En septiembre de 2017 dos fuertes terremotos afectaron a más de 12 millones de personas en México, dejando más de 400 víctimas mortales y graves daños materiales, principalmente en viviendas, escuelas, carreteras, sistemas de agua potable y saneamiento.
En respuesta a esa crisis humanitaria España envió una Unidad Militar de Emergencia para las tareas de rescate y, a través de la ONG Save de Children, ofreció atención psicológica a los niños y niñas afectados, así como a sus familiares.
Además, más de 70 empresas españolas aportaron también recursos materiales, humanos y económicos.
"La fase de rehabilitación requerirá de un mayor volumen de recursos y esfuerzo en un ambiente de diálogo entre diferentes actores; un esfuerzo que esta Alianza se propone coordinar e impulsar para lograr el mayor impacto de cada una de las iniciativas", destacó García Casas durante la presentación.
En el acto estuvieron presentes empresas españolas del sector de la construcción, la energía y la hostelería, entre otros ámbitos, todas con presencia en México.
El proyecto fue presentado por Fernando García Casas, secretario de Estado de Cooperación Internacional y para Iberoamérica de España y por Roberta Lajous, embajadora mexicana en la capital española.