Una larga fila de vehículos aguardaba bajo una llovizna helada en un punto de revisión rumbo a los vecindarios del este de Paradise, donde se levantaron las órdenes de evacuación.
ESTADOS UNIDOS.- Algunos habitantes de una localidad del norte de California que fue destruida por un catastrófico incendio hace casi un mes finalmente recibieron el el miércoles autorización para regresar a sus casas para buscar entre las ruinas calcinadas algunos recuerdos familiares, fotografías y otras pertenencias que pudieran haberse salvado.
Una larga fila de vehículos aguardaba bajo una llovizna helada en un punto de revisión rumbo a los vecindarios del este de Paradise, donde se levantaron las órdenes de evacuación.
Pasando el retén, trabajadores con impermeables amarillos continuaban retirando escombros de las casas destruidas por el fuego y quitaban árboles de las calles, en las que había esparcidos contenedores de basura derretidos y había vehículos sin neumáticos.
Antes de dirigirse a su casa, Joyce McLean, de 73 años, y su esposo, Jerry McLean, hicieron una escala en una tienda para comprar toallas de papel y bolsas de plástico.
“No teníamos muchas cosas de gran valor, pero sí muchos recuerdos”, afirmó Joyce McLean, en referencia a los adornos navideños que hizo su hijo cuando era niño y algunas cosas de la bisabuela canadiense de su esposo. “Si logro encontrar un fragmento pequeño de algo familiar o de mi hijo, estaré feliz”.
El acceso a los vecindarios fue restringido únicamente a residentes, pero a partir del jueves quedará abierto para todos.