En Texas, precio de electricidad incrementó luego de la tormenta invernal que azotó la región estadounidense hace apenas unos días, lo que también provocó que dejará de exportar gas natural –usado para generar energía eléctrica- a México.
Sin embrago la situación en Texas hizo que los precios de algunos servicios, entre ellos, la luz, agua y hasta la gasolina subieran y los pobladores se quejaran en redes sociales sobre el nuevo costo.
Mientras todas las centrales eléctricas del estado volvieron a funcionar, aunque más de 195 mil hogares seguían sin electricidad el viernes por la mañana, y más de 14.4 millones de personas en 160 de los 254 condados de Texas tenían interrumpido el servicio de agua, según la Comisión de Calidad Ambiental de Texas.
Miles de personas recuperan el agua y la electricidad en Texas
Texanos recuperaban paulatinamente el sábado los servicios de agua potable y electricidad tras una ola de frío polar sin precedentes que paralizó durante varios días a este estado del sur de Estados Unidos más habituado a las altas temperaturas que al frío.
Más de 60 mil hogares seguían sin electricidad el sábado en el “estado de la estrella solitaria”, según el sitio poweroutage.us.
¿Qué dicen las empresas?
La compañía de energía Griddy ofrecía tarifas flexibles a sus clientes, lo que significa menor costo en los cobros por electricidad, sin embargo, la tormenta hizo que dichos costos se elevaran y ahora los usuarios tienen recibos de más del 300% más caros.
Por su parte, Griddy mandó un comunicado donde explica el alza de los precios.
“Según las reglas de mercado de ERCOT, este escenario de precios solo se aplica cuando la generación disponible está a punto de agotarse”. Griddy
Cabe mencionar que, en Texas, dijo, el mercado de la electricidad no está regulado por el estado, por lo que las empresas pueden diseñar diversos esquemas de cobro para sus clientes.
¿Por qué las tarifas subieron en esta región de Estados Unidos?
Este episodio climático extremo causó estragos en el sur y centro de Estados Unidos esta semana, cobrando la vida de al menos 40 personas, según medios estadounidenses.
Las temperaturas subieron el sábado, en torno a los 15 grados Celsius en Houston y Austin, en Texas.
El mandatario Joe Biden, que firmó una nueva declaración de emergencia para Texas, indicó que pretendía viajar a este estado fronterizo con México, pero recalcó que no quería que su visita fuera “una carga más”.