El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, propuso el domingo, 28 de marzo de 2021, pagar las vacunas contra el coronavirus con petróleo, sin ofrecer más detalles de cómo funcionaría el esquema.

Las exportaciones de crudo de la nación miembro de la OPEP, golpeada por una larga crisis económica, se desplomaron a sus niveles más bajos en décadas por años de desinversión y desde que Washington sancionó a la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) en 2019, cortando las ventas a Estados Unidos y disuadiendo a otros clientes de no comprar petróleo.

Maduro dijo que Venezuela estaba trabajando para pagar las vacunas del mecanismo COVAX, de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que ofrece las inmunizaciones a los países pobres, con fondos venezolanos congelados en las cuentas en el extranjero por las sanciones y con envíos de petróleo.

“Venezuela tiene los barcos petroleros. Tiene los clientes para que nos compren el petróleo“, dijo Maduro en un discurso en la televisión estatal. “Estamos listos y preparados, petróleo por vacunas, pero no le vamos a mendigar a nadie. Venezuela no se le arrodilla a nadie en este mundo”, agregó.

Venezuela recibió dosis de vacunas de sus aliados de Rusia y China. El gobierno y la oposición estuvieron en conversaciones con la Organización Panamericana de la Salud (OPS) sobre el acceso de Venezuela a las vacunas a través de COVAX, pero el gobierno dijo la semana pasada que no autorizaba la vacuna AstraZeneca PLC, una de las principales inoculaciones desplegadas por el programa en América Latina. Hace dos semanas la oposición anunció que estaba haciendo gestiones para obtener permisos ante el Departamento del Tesoro de Estados Unidos con el fin de usar los fondos congelados en cuentas en ese país para pagar al mecanismo COVAX.

Washington califica a Maduro, en cuya gestión ha habido un colapso económico, de dictador por fraude en su reelección en 2018 y de violar los derechos humanos de la disidencia. El mandatario venezolano dice Estados Unidos busca derrocarlo en un golpe de Estado para tomar el control de las reservas de crudo de Venezuela, las más grandes del mundo, según datos.