Brasil registró su primer caso confirmado de la variante de coronavirus altamente contagiosa descubierta en Sudáfrica, una nueva señal de peligro para un país ya devastado por el número diario de muertos más alto del mundo, cifras que son impulsadas por una extendida variante local.
La semana pasada, científicos del instituto biomédico Butantan dijeron que el caso, identificado en una mujer en el estado de Sao Paulo, podría ser una nueva variante local. Un análisis más detallado lo confirmó como el primer caso local conocido de la variante que circula ampliamente en Sudáfrica y en otros países.
Los científicos temen un enfrentamiento entre la variante sudafricana y la variante brasileña ya desenfrenada, conocida como P.1, que son más contagiosas y posiblemente más mortales que la versión original del coronavirus y que han provocado acelerados aumentos de COVID-19.
“Podría ser un duelo enorme”, advirtió María Carolina Sabbaga, una de las coordinadoras de Butantan para el estudio de nuevas variantes. “Creo que P.1 ya es la dominante. No estoy segura de si la (variante) sudafricana superará a P.1, veremos”.
En estudios, la variante sudafricana parece disminuir la protección de las vacunas actuales.
Brasil se encuentra en medio de una brutal ola de COVID-19, registrando récords de muertes sobre la base semanal. El martes, el Ministerio de Salud informó un récord en un solo día de 4,195 muertes.
El brote en el país más grande de América del Sur puede superar a Estados Unidos y convertirse en el que deje más muertes en todo el mundo, predicen algunos expertos médicos.
José Patané, un investigador de Butantan, dijo que la variante sudafricana probablemente llegó a Brasil después de extenderse por Europa hacia fines de 2020.
El primer diagnóstico local, una mujer de unos 30 años en la ciudad de Sorocaba, no había viajado al extranjero ni había entrado en contacto con alguien que lo hiciera, lo que indica una transmisión comunitaria local, dijeron los investigadores.