La autoridad reguladora de fármacos de Suiza, Swissmedic, aprobó este lunes el tratamiento de pacientes de COVID-19 no hospitalizados Ronapreve, desarrollado por las farmacéuticas Regeneron y Roche y que se basa en un cóctel de anticuerpos monoclonales (casirivimab-imdevimab).
La aprobación del tratamiento, inicialmente presentado para pacientes sí hospitalizados, se ha decidido al demostrarse en pruebas que el fármaco contribuye a una reducción de los ingresos, destacó Roche en un comunicado.
Los datos también parecen indicar una reducción de las infecciones en personas expuestas al coronavirus.
Los estudios admiten que el tratamiento no conserva la misma eficacia ante la nueva variante ómicron, aunque los expertos de la compañía trabajan para responder a esta nueva cepa, destacó el comunicado de la firma de Basilea.
Ronapreve también está homologado en Reino Unido, Japón, y, bajo ciertas condiciones, en Reino Unido, Australia, Estados Unidos, India y Canadá.
Este cóctel de dos anticuerpos monoclonales es distribuido en el mercado estadounidense por Regeneron (uno de los primeros en usarlo allí, el año pasado, fue el entonces presidente Donald Trump), mientras que Roche lo distribuye en el resto del mundo.
Pese a su alto precio y aún baja disponibilidad en muchos países, el uso de anticuerpos monoclonales ha supuesto un avance positivo en la rama de tratamientos contra la COVID-19 , que estaba avanzando más lentamente que la de las vacunas.