El Gobierno de Boris Johnson afirmó este lunes que dará “apoyo total” a las fuerzas de seguridad estadounidenses en la investigación sobre la toma de rehenes perpetrada el fin de semana por un británico en una sinagoga de Texas.
"Estamos junto a nuestros amigos estadounidenses contra aquellos que buscan difundir el odio y el miedo en todo el mundo. Es un terrible acto de terrorismo y antisemitismo", afirmó un portavoz del primer ministro.
Los cuatro rehenes de la sinagoga de la congregación Beth Israel en Colleyville, una ciudad de unos 23 mil habitantes a unos 40 kilómetros de Dallas, fueron liberados sanos y salvos el sábado por la noche.
El ataque terminó con un asalto policial y la muerte del secuestrador, identificado por el FBI como Malik Faisal Akram, de 44 años y nacionalidad británica.
La policía antiterrorista del noroeste de Inglaterra anunció el domingo que había detenido a dos jóvenes al sur de Manchester en relación con la toma de rehenes.
En la página de Facebook de la comunidad musulmana local, un hombre que se identificó como hermano de Akram afirmó que este “sufría problemas psicológicos”.
“No había nada que pudiéramos haberle dicho o hecho para convencerle de que se entregara”, afirmó, asegurando haber estado en contacto con Faisal, los negociadores y el FBI hasta la madrugada.
Por su parte, el Consejo Musulmán de Reino Unido denunció la toma de rehenes en los términos más enérgicos posibles.
"Este acto es aún más reprobable porque se llevó a cabo en un lugar de culto donde los judíos eran el objetivo. Es, sencillamente, un delito de odio y un acto antisemita", reaccionó en un comunicado.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, calificó el domingo como un “acto de terrorismo” la toma de rehenes en una sinagoga de Texas.
Además, pareció confirmar que el atacante, quien posteriormente murió, exigía la liberación de la terrorista convicta Aafia Siddiqui.
“Este fue un acto de terrorismo” que estaba relacionado con alguien que fue detenido hace 15 años y ha estado en la cárcel durante 10 años”, dijo Biden.