El caso de Drayke Hardman, el niño de 12 años que se suicidó después de sufrir durante todo un año bullying, maltrato físico y psicológico provocado por un estudiante de la secundaria Tooele High School en Utah, provocó conmoción en Estados Unidos y el mundo y dio origen a la campaña #DoItForDrayke contra el acoso.
Drayke murió el 10 de febrero de 2022 y su funeral será este viernes 18 en Salt Lake City en una ceremonia privada. Su familia, sin embargo, creó una página web en la que se compartieron fotos de niño para que cualquier persona deje sus condolencias. Personas de varios países del mundo han dejado así sus mensajes de apoyo y acompañamiento.
A principios de la semana pasada, Drayke regresó a su casa con un ojo morado tras su práctica de baloncesto y le confesó a su hermana que se lo provocó un compañero en un altercado.
El miércoles 9 de febrero, por la noche, el menor faltó a su práctica y después intentó suicidarse. Fue encontrado por sus hermanas, quienes lo llevaron al hospital en estado crítico. Fue declarado muerto el jueves 10 de febrero por la mañana.
Los padres de Drayke hicieron público su caso e iniciaron la campaña #DoltForDrayke (HazloPorDrayke) contra el acoso escolar. Autorizaron hacer públicas las imágenes de su hijo muerto, mientras su padre y sus hermanas lloran su pérdida.
“¿Qué haría que un niño de 12 años perdiera tanta esperanza en su corazón que se amarraría la sudadera con capucha alrededor del cuello para quitarse la vida?”, preguntó Andrew Hardman, su padre, en Instagram.
“Mi hijo nunca se casará, nunca se convertirá en padre. Joder, nunca tendrá ningún tipo de futuro. Todo por culpa de un niño cobarde. ¿Por qué ese niño trató a mi hijo como si no fuese humano? ¿Qué pasa en su cobarde interior y en el interior de sus amigos, igual de cobardes y basura que él para convertirse en defensores del odio? ¿Son los padres? No tengo respuestas, lo único que sé es que esto tiene que parar ya”, escribió.
Su madre Samie publicó en sus redes sociales que su “corazón estaba destrozado”, pero aún así rendiría a su “chico guapo” que se suicidó como resultado de la “intimidación” de un compañero.
“Mi chico guapo estaba peleando una batalla de la que ni siquiera yo podía salvarlo. Es real, silencioso y no hay absolutamente nada que puedas hacer como padre para quitar este profundo dolor. No hay señales, solo palabras hirientes de otros que finalmente robaron a nuestro Drayke de este lugar cruel. ¿Cómo un niño de 12 años que fue amado ferozmente por todos piensa que la vida es tan difícil que necesita salir de ella?”, dijo en Instagram.
Prometió pasar cada minuto de su vida enseñando bondad en memoria de su hijo y pidió a la gente enseñar a vivir y a amar ferozmente a sus hijos, que les enseñen amabilidad y bondad.