Altos funcionarios estadounidenses dijeron el domingo que Estados Unidos no tiene una política de cambio de régimen en Rusia, intensificando los esfuerzos para aclarar los comentarios del presidente Joe Biden, quien dijo que el mandatario Vladimir Putin “no puede seguir en el poder”.
Los comentarios de Biden -emitidos en Polonia el sábado- también incluyeron una declaración en la que calificó a Putin como un “carnicero”, en una fuerte escalada de la retórica de Estados Unidos hacia Moscú por la invasión de Ucrania.
Julianne Smith, la embajadora de Estados Unidos ante la OTAN, trató de contextualizar los comentarios de Biden, diciendo que siguieron a un día de conversaciones del presidente demócrata con refugiados ucranianos en Varsovia.
La invasión rusa -que lleva más de un mes- ha expulsado de sus hogares a una cuarta parte de los 44 millones de habitantes de Ucrania.
“En ese momento, creo que fue una reacción muy humana, una declaración de principios por los relatos que había escuchado ese día”, dijo Smith al programa State of the Union de la cadena CNN.
“Estados Unidos no tiene una política de cambio de régimen en Rusia. Así de claro”, explicó.
El secretario de Estado, Antony Blinken, dijo en una conferencia de prensa en Jerusalén que cualquier decisión sobre el futuro liderazgo de Rusia “dependería del pueblo ruso”.
El senador James Risch, el principal senador republicano en el Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara alta, calificó los comentarios de Biden como una “horrible metedura de pata” y dijo que deseaba que el mandatario se hubiera apegado al protocolo en sus comentarios durante la visita a Polonia.
“La mayoría de las personas que no se dedican a las relaciones exteriores no se dan cuenta de que esas nueve palabras que pronunció provocarían el tipo de conmoción que provocaron”, dijo a CNN.
“Esto va a causar un gran problema”.