Un cielo casi sin lluvia parecía ofrecer un respiro a Sudáfrica tras unas inundaciones en la costa este que dejaron cientos de muertos y decenas de personas desaparecidas.
La región de Durban, una ciudad portuaria de 3.5 millones de habitantes en la costa este, fue la más afectada y concentró la mayoría de las víctimas. Las precipitaciones provocaron inundaciones abundantes y mortales deslizamientos de tierra.
“El número de muertos se ha elevado a 443″, declaró Sihle Zikalala, el ministro de la provincia de KwaZulu- Natal, donde se sitúa Durban. Unas 63 personas siguen desaparecidas, agregó.
En la mañana de ayer todavía llovía en algunas zonas, pero a una baja intensidad, en comparación con los últimos días.
“El riesgo de inundación es escaso en el KwaZulu-Natal”, aseguró Puseletso Mofokeng, del instituto nacional de meteorología.
“Las precipitaciones desaparecerán totalmente antes del miércoles y hasta el final de la semana próxima”, señaló.
Autoridades locales estiman que los daños para la provincia son millonarios y que unas 40 mil personas se han visto afectadas por las inundaciones desde el comienzo de las lluvias torrenciales, el pasado lunes.
También se calcula que 3 mil 937 casas quedaron destruidas y 8 mil 39, parcialmente dañadas.
El gobierno sudafricano declaró el estado de desastre en la provincia y desplegó efectivos del Ejército para asistir en los trabajos de emergencia y búsqueda de desaparecidos.
Zikalala señaló que la provincia va a pedir al Ejecutivo que considere incluso declarar el estado de desastre a nivel nacional por la magnitud de la tragedia.
Durban, la ciudad más importante de KwaZulu-Natal y la tercera más grande de Sudáfrica, es la más afectada.
Las inundaciones golpearon especialmente las barriadas de asentamientos informales de sus alrededores, algunas de ellas barridas por completo por el agua y los corrimientos de tierra.
Según cálculos de Mxolisi Kaunda, alcalde del ayuntamiento que acoge Durban (oficialmente denominado eThekwini), sólo en esa municipalidad los daños se cuantificaban el jueves en 757 millones de rands (unos 50 millones de euros).