El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció un acuerdo con Arabia Saudí para que barcos israelíes puedan seguir gozando de libertad de navegación en las aguas que rodean dos estratégicas islas del Mar Rojo, en lo que supone un acercamiento indirecto entre Israel y Arabia Saudí.
Biden hizo el anuncio en declaraciones a la prensa después de reunirse durante dos horas con el príncipe heredero saudí, Mohamed bin Salmán, y el rey Salmán bin Abdulaziz.
El acuerdo se centra en dos pequeñas islas en el Mar Rojo, Tirán y Sanafir, que tienen una importancia estratégica por situarse en la desembocadura del Golfo de Aqaba, desde donde en caso de conflicto se podría bloquear el paso a un importante puerto de Israel y otro de Jordania.
Estados Unidos lidera una fuerza de observadores internacionales en esas islas cuya misión es supervisar el cumplimiento de los tratados de paz entre Egipto e Israel, y específicamente garantizar el derecho a la libre navegación de los navíos israelíes.
Hoy, según anunció Biden, Riad y Washington anunciaron un acuerdo para que esos observadores, incluidos los militares estadounidenses, dejen la isla de Tirán a finales de año.
Según el mandatario, al mismo tiempo, Arabia Saudí ha “accedido a preservar todos los compromisos de seguridad en el área”, de manera que Israel mantendrá la libertad de navegación para sus navíos tal y como estaba recogida en el tratado de paz egipcio-israelí de 1979.
Hasta ahora, el problema era que no había una fórmula para que Riad diera garantías a Israel porque los dos países no tienen relaciones diplomáticas.
La solución ha sido que EUA suscriba acuerdos con cada una de las partes.
El Gobierno de Biden lleva negociando desde hace meses con Israel y Arabia Saudí para conseguir un acercamiento entre ambos, sus dos mayores aliados de Oriente Medio, sobre todo ahora que la posibilidad de un acuerdo con Irán para revivir el acuerdo nuclear parece alejarse.