El Kremlin descartó una movilización general o parcial de su población, pese a la retirada de las tropas rusas del este de Ucrania, muy criticada por los partidarios de una campaña militar mucho más agresiva en el país vecino.
“En estos momentos no estamos hablando de esto”, dijo Dmitri Peskov, el portavoz del presidente Vladímir Putin.
El repliegue ruso de la región ucraniana de Járkov ha vuelto a poner sobre la mesa la acuciante falta de hombres en las filas del Ejército ruso que combate en Ucrania. El diputado crimeo del partido del Kremlin, Rusia Unida, Mijaíl Sheremet, aseguró que, sin la movilización general, las tropas rusas no lograrán los objetivos que se marcaron cuando comenzó la “operación militar especial”, en febrero pasado.
Esa opinión es compartida por muchos expertos militares rusos, mientras el líder checheno, Ramzán Kadírov, ha criticado los errores cometidos por los generales en el campo de batalla y se ha mostrado dispuesto a enviar a 10 mil hombres al frente.
En el campo de batalla, Rusia lanzó ayer ataques aéreos y mató al menos a 250 combatientes ucranianos en Járkov, donde las fuerzas de Ucrania aseguraron haber reconquistado más de 20 asentamientos en las últimas 24 horas, ultimando a más de 300 efectivos rusos y capturando a muchos prisioneros de guerra.