Rusia está dispuesta a hablar con Estados Unidos y el papa Francisco para una solución a la crisis creada por la campaña militar rusa en Ucrania, que inició el pasado 24 de febrero, afirmó el Kremlin.
“Estamos dispuestos a debatir todo esto (la situación en Ucrania) con los estadounidenses, con los franceses y con el pontífice”, dijo Dmitri Peskov, portavoz de la Presidencia rusa.
Comentó así la iniciativa del presidente francés, Emmanuel Macron, que pidió al papa Francisco que llame al mandatario ruso, Vladímir Putin, así como al patriarca de la Iglesia ortodoxa, Kiril, y al estadounidense Joe Biden para impulsar un proceso de paz en Ucrania.
“Si esto realmente va en el cauce de los esfuerzos para la búsqueda de posibles soluciones, se puede valorar positivamente”, recalcó.
Al mismo tiempo, el portavoz indicó que nadie ha propuesto llamar al presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, para que aclare “la base legal que prohíbe cualquier tipo de negociación con la parte rusa”.
El papa Francisco fustigó la amenaza del arma nuclear durante un acto en el Coliseo de Roma, durante el cual lanzó un nuevo pedido por la paz frente a este “momento tan dramático” para el mundo por la guerra en Europa.
No obstante, el presidente ruso instó a su gobierno a que reduzca la burocracia para producir suficientes armas y suministros para alimentar la guerra en Ucrania, donde la contraofensiva de Kiev, provista de armas de Occidente, ha hecho retroceder a las fuerzas rusas.
La reconstrucción
El presidente de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, llegó a Kiev en su primera visita a Ucrania desde el inicio de la invasión rusa, al tiempo que varios países de la Unión Europea (UE) estudian un Plan Marshall para reconstruir Ucrania cuando termine la guerra.
Declaró, tras llegar a la capital ucraniana, que “era importante para mí, en esta fase de los ataques aéreos con drones, misiles de crucero y proyectiles, enviar una señal de solidaridad”.
Tras reunirse con las autoridades del país, más tarde debió ingresar a un refugio antiaéreo después de que sonara una sirena antiaérea.
En tanto, el gobierno de Estados Unidos está analizando la alternativa de proveer a Ucrania con sistemas de defensa aérea MIM-23 HAWK que aún dispone en sus depósitos. La transferencia formaría parte de uno de los próximos paquetes de asistencia militar previsto por la Casa Blanca, con la intención de fortalecer las capacidades ucranianas para defenderse de los ataques rusos con drones y misiles de crucero, según lo declarado por funcionarios norteamericanos a la agencia Reuters.
Finalmente, el presidente Joe Biden llamó a Rusia a que no use un arma nuclear en la guerra con Ucrania, señalando que una escalada de ese tipo sería un grave error.
Cuando los periodistas le preguntaron si cree que Rusia está preparando un ataque con ‘bomba sucia’ del que luego culparía a Ucrania, Biden dijo: “Rusia estaría cometiendo un error increíblemente grave si usara un arma nuclear táctica”.