Una nueva variante del virus SARS-CoV-2, denominada EG.5.1 y apodada "Eris", ha emergido en el Reino Unido y Estados Unidos, causando un incremento alarmante en los casos de COVID-19 durante este verano. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha comenzado a monitorear de cerca esta cepa debido a su relación con un aumento en las hospitalizaciones en ambos países.
La variante EG.5.1, conocida como "Eris", ha sido añadida a la lista de variantes bajo vigilancia por la OMS debido al marcado incremento en los casos registrados en el Reino Unido y Estados Unidos. Informes de medios locales indican que desde el 20 de julio, esta cepa ha sido la segunda más prevalente en el Reino Unido, representando aproximadamente el 14.55% de los casos. Lo más inquietante es que su propagación se ha acelerado a un ritmo del 20.51% por semana, según datos de la Agencia de Seguridad Sanitaria de Gran Bretaña (UKHSA, por sus siglas en inglés).
"Eris" es una subvariante de la conocida variante Omicron (B.1.1.529), y ha sido colocada bajo observación en la categoría EG.5#, que engloba el linaje de los EG.5. El nombre "Eris" fue adoptado luego de varias publicaciones en Twitter, según el profesor T. Ryan Gregory, de la Universidad de Guelph en Canadá.
La propagación de la variante "Eris" ha superado a la anteriormente prevalente "Arcturus" en Estados Unidos, convirtiéndose en la variante más común en solo dos semanas. Las cifras reportadas hasta el 5 de agosto por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) indican que "Eris" ha afectado al 17.3% de los casos en el país. Tanto Estados Unidos como el Reino Unido han experimentado un aumento en las hospitalizaciones por COVID-19 durante este verano. Según los CDC, en Estados Unidos se ha observado un incremento del 12.1% en las admisiones hospitalarias hasta la semana finalizada el 22 de julio.
En el caso del Reino Unido, las hospitalizaciones también se han disparado. Inglaterra registró un alarmante aumento del 40.7% en las admisiones hospitalarias durante la semana finalizada el 29 de julio en comparación con la semana previa, tal como informó la UKHSA.
La propagación y el impacto de la variante "Eris" han puesto en alerta a las autoridades sanitarias internacionales, ya que su rápida expansión y su asociación con un aumento en las hospitalizaciones subrayan la importancia continua de mantener medidas preventivas y de control para combatir la pandemia del COVID-19.