El expresidente de los Estados Unidos, Donald Trump, se encuentra ante un nuevo proceso legal que lo insta a entregarse en un plazo de una semana para ser fichado en la prisión de Fulton, Georgia. Este desarrollo surge a raíz de las acusaciones que afirman que manipuló presuntamente los resultados electorales en este estado.
A diferencia de ocasiones anteriores en las que enfrentó procesos judiciales en Nueva York, Miami y Washington DC, esta vez Trump y otras 18 personas imputadas serán sometidas al procedimiento en la cárcel del condado de Fulton. La facilidad de acceso al centro penitenciario, que opera las 24 horas, brinda la oportunidad para que los acusados se entreguen en cualquier momento, antes de la fecha límite establecida por la fiscal Fani Willis, el 25 de agosto.
En este lugar, donde se espera que Trump comparezca, se presentarán formalmente los cargos en su contra y se tomarán medidas como la toma de huellas y la fotografía policial.
Sin embargo, el expresidente aún no ha dado indicaciones sobre cuándo planea entregarse. En noticias recientes, Trump canceló una conferencia de prensa programada para el 14 de agosto en la que tenía previsto presentar pruebas sobre lo que describió como un "fraude electoral presidencial" en Georgia. Esta cancelación se atribuyó a su enfoque en la defensa legal y la intención de presentar el informe durante el proceso judicial.
Amenazan a miembros del jurado que imputaron a Trump
La oficina del alguacil del condado de Fulton ha anunciado investigaciones en respuesta a amenazas dirigidas a los miembros del gran jurado que imputaron a Trump. Estas amenazas, que han incluido la divulgación de información personal a través de redes sociales, están siendo rastreadas para garantizar la seguridad de quienes cumplieron con sus responsabilidades cívicas. Las autoridades han subrayado la seriedad con la que abordan estas amenazas creíbles.
Antecedentes legales de Trump
Este proceso representa la cuarta imputación penal que enfrenta el expresidente Trump. Previamente, fue imputado en Washington DC por cargos relacionados con intentos de revertir los resultados de las elecciones de 2020, culminando en el asalto al Capitolio. En Nueva York, enfrenta cargos por pagos a la actriz Stormy Daniels para silenciar un asunto durante la campaña electoral de 2016. Además, en Florida, se le imputan 40 cargos por el presunto retiro y posesión indebida de documentos clasificados de la Casa Blanca.
