El Centro Nacional de Sismología de la India (NCS) ha registrado una serie de sismos este martes en el subcontinente asiático, dejando en alerta a la región.
Cinco temblores consecutivos, con magnitudes que oscilaron entre 2,7 y 6,2, hicieron temblar la tierra en diversas localidades de India, Nepal y Afganistán, provocando daños materiales en algunas áreas.
El tercer y más potente de estos terremotos se produjo a las 14:51 hora local (09:21 GMT) con epicentro en el oeste de Nepal, alcanzando una magnitud de 6,2 y a una profundidad de cinco kilómetros. Un temblor de 4,6 de magnitud, a diez kilómetros de profundidad, se registró media hora antes en la misma ubicación.
Además, se reportaron otros dos sismos de 4,3 y 3,0 de magnitud en los estados norteños de Uttarakhand y Assam, respectivamente, en India, según informó la agencia india.
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— Vidarbha Times (@VidarbhaaTimes) October 3, 2023
Por otro lado, el NCS también registró un seísmo de 4,7 de magnitud a las 16:29 hora local (10:59 GMT) en Fayzabad, en el oeste de Afganistán, a una profundidad de 10 kilómetros.
Sin embargo, el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) informó de solo dos sismos casi simultáneos de 4,9 y 5,7 de magnitud, con epicentro en la ciudad nepalí de Dipayal Silgadhi, en el oeste de Nepal.
Estos temblores se sintieron en ciudades importantes como Nueva Delhi y Katmandú, y se han reportado daños en algunas viviendas en Nepal. Hasta el momento, no se han reportado víctimas mortales.
Nepal y Afganistán, dos países propensos a desastres naturales, se enfrentan a esta situación con poblaciones vulnerables, en su mayoría empobrecidas, y con una infraestructura insuficiente para hacer frente a inundaciones y terremotos.
La Asociación Asiática de Preparación (APP), una alianza creada para coordinar la respuesta a emergencias en países asiáticos, ha señalado que Katmandú es la capital expuesta al mayor riesgo de terremotos entre 21 megaciudades de todo el mundo.
Recordemos que en 2015, Nepal sufrió un devastador terremoto de magnitud 7,8 que causó la pérdida de casi 9,000 vidas y dejó a cientos de miles de personas sin hogar. La reconstrucción en Nepal aún se encuentra en curso, con avances ralentizados debido a los efectos de la pandemia.
Afganistán también ha experimentado tragedias similares en el pasado, con terremotos mortales en 1998 que cobraron miles de vidas. La región sigue siendo vulnerable a estos eventos naturales, lo que subraya la necesidad de una mayor preparación y resiliencia en estos países.
