Las autoridades sanitarias de Perú han establecido un cerco epidemiológico luego de confirmarse un caso de rabia humana en una mujer de 54 años en el distrito de Chiguata, ubicado en la región sureña de Arequipa. La paciente había sido mordida por un perro no identificado semanas atrás.
El Ministerio de Salud (Minsa) informó que la paciente está siendo tratada en el Hospital Regional Honorio Delgado Espinoza de Arequipa, que se encuentra a más de 1.000 kilómetros al sur de Lima. Para contener la propagación de la enfermedad, el Minsa ha desplegado al Instituto Nacional de Salud (INS) y al Centro Nacional de Epidemiología, Prevención y Control de Enfermedades (CDC) en la zona.
Además, la Gerencia Regional de Salud (Geresa) de Arequipa ha implementado un cerco epidemiológico en el área donde se produjo el caso, con el objetivo de interrumpir la cadena de transmisión de la rabia. Las personas que estuvieron en contacto con la paciente también han recibido atención médica y han sido vacunadas contra la rabia.
El Ministro de Salud, César Vásquez, ha ordenado el desplazamiento de un equipo especial del CDC y de la Dirección de Prevención y Control de Enfermedades Metaxénicas y Zoonosis del Minsa a Arequipa para colaborar en la investigación de este caso.
Según el CDC, el último caso de rabia humana urbana en Perú se registró en 2015, en una persona infectada en la región sureña de Puno, cerca de la frontera con Bolivia.
El Minsa ha señalado que estos casos de rabia humana se han producido desde la reintroducción de la rabia canina en el país en 2014, por lo que se continuará con la investigación epidemiológica en el terreno, el seguimiento clínico del paciente y de las personas expuestas.
Además, se garantizará el suministro de insumos y medicamentos para la paciente, se mantendrá la vacunación de los contactos y se intensificarán las campañas de vacunación de perros en la zona.