En un tenso debate en el Senado de los Estados Unidos, los líderes demócratas y republicanos continúan negociando un paquete de ayuda bélica que afectará no solo a Ucrania e Israel, sino también al Mar del Sur de China. Sin embargo, la discusión se ha estancado debido a las diferencias en torno a la seguridad en la frontera con México.
"El destino del mundo, de Ucrania e Israel, está en juego", dijo el demócrata Chris Murphy, que preside el subcomité de Seguridad Nacional en el Senado.
El republicano James Lankford, principal negociador del partido, expresó su disposición a continuar las negociaciones pero enfatizó la urgencia de abordar los problemas en la frontera de Estados Unidos.
Por otro lado, el senador republicano John Cornyn, representante de Texas, expresó su escepticismo sobre la viabilidad del paquete de asistencia y la inclusión de medidas de control fronterizo.
De hecho, la noción de que la cuestión migratoria y de que la llegada de personas a través de la "descontrolada" frontera con México es un problema creciente de seguridad nacional está cada vez más presente en la opinión pública de EU.
La creciente percepción pública de que la inmigración y la seguridad en la frontera son problemas cruciales para la seguridad nacional está añadiendo presión al debate.
La senadora independiente Kirsten Sinema de Arizona subrayó: "Decir que se trata de una crisis absoluta es subestimarla".. Esto sugiere que la cuestión de la seguridad fronteriza está generando una creciente preocupación entre los legisladores de diferentes filiaciones.