El gobierno británico ha llevado a cabo con éxito una prueba del avanzado láser "Dragon Fire", con un costo de 140 millones de libras esterlinas (177 millones de dólares).
Esta arma de energía dirigida por láser ha demostrado su capacidad al dispararse a un objetivo remoto en el campo de tiro de las Hébridas, según el Ministerio de Defensa.
El "Dragon Fire" es una innovadora arma de línea de visión diseñada para atacar con precisión milimétrica a objetivos visibles, como misiles, aviones, drones e incluso satélites.
Cada disparo tiene un costo sorprendentemente bajo, solo 10 libras, lo que lo posiciona como una alternativa de bajo costo a largo plazo en comparación con los misiles convencionales.
El gobierno británico informa que este láser puede reemplazar multimillonarios sistemas de defensa, como el Sea Viper de la Royal Navy, utilizado contra drones y cohetes rebeldes hutíes en el mar Rojo.
Su capacidad para atravesar objetivos con un "intenso rayo de luz" y hacer explotar ojivas de misiles lo convierte en una herramienta valiosa para enfrentar amenazas emergentes.
El láser, desarrollado con un retraso de cinco años y un costo total de más de 140 millones de libras, ha sido elogiado por el secretario de Defensa, Grant Shapps, como una tecnología de vanguardia que revolucionará el espacio de batalla.
Shapps destacó que armas como el "Dragon Fire" son fundamentales para enfrentar las crecientes amenazas y prepararse para el futuro.
DragonFire is an advanced military laser, being developed by @dstlmod and 🇬🇧 industry.
— Ministry of Defence 🇬🇧 (@DefenceHQ) January 19, 2024
The laser-directed energy weapon engages targets at the speed of light, using an intense beam of energy to cut through objects, leading to structural failure.
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La prueba más reciente, realizada en noviembre de 2022, consistió en disparar contra un dron a una distancia superior a las dos millas. Este éxito acelera los planes para integrar el láser en situaciones de combate y fortalece la posición del Reino Unido en la vanguardia de la innovación militar.
El proyecto, liderado por el Laboratorio de Ciencia y Tecnología de Defensa (Dstl) en colaboración con MBDA, Leonardo y QinetiQ, ha recibido elogios por parte del director ejecutivo de Dstl, Paul Hollinshead. Hollinshead subrayó la importancia de comprender las amenazas y aprovechar las oportunidades potenciales que brinda esta avanzada tecnología.
Shimon Fhima, director de programas estratégicos del Ministerio de Defensa , declaró que "las pruebas de DragonFire en las Hébridas demostraron que nuestra tecnología líder en el mundo puede rastrear y activar efectos de alto nivel a distancia. En un mundo de amenazas en evolución, sabemos que nuestro enfoque debe estar en brindar capacidad al combatiente y buscaremos acelerar esta próxima fase de actividad".
