Las autoridades de Filipinas empezaron a evacuar de forma urgente a 87,000 personas debido a la erupción del volcán Kanlaon, que este lunes liberó peligrosas nubes de cenizas incandescentes.
La Oficina de Defensa Civil del país informó que la amenaza volcánica sigue en aumento, por lo que la evacuación se lleva a cabo principalmente en las zonas cercanas, como La Castellana, donde 46,900 personas se encuentran a entre 4 y 6 kilómetros del cráter.
En respuesta a la situación, se habilitó un centro de evacuación en Bacolod con capacidad para 30,000 personas.
El volcán, ubicado en la isla Negros, entró en erupción a las 15:03 horas (7:03 GMT), según el Instituto Filipino de Vulcanología y Sismología (Phivolcs), que reportó una nube de cenizas que alcanzó los 3,000 metros de altura.
La caída de cenizas afectó a varias ciudades de la zona, como Bago, donde se distribuyeron mascarillas y se aceleraron las evacuaciones.
Además, se detectaron flujos piroclásticos, mezclas peligrosas de gas y material volcánico que pueden moverse a gran velocidad y temperatura, poniendo en riesgo la vida de las personas cercanas.
Phivolcs elevó la alerta a nivel 3, lo que indica que el magma está cerca de la superficie y que la actividad volcánica podría desencadenar nuevas erupciones explosivas en las próximas semanas. Las autoridades han ordenado evacuaciones en un radio de seis kilómetros desde la cima del volcán.
Esta erupción se suma a una serie de eventos volcánicos en Kanlaon, que en septiembre del año pasado ya había obligado a evacuar a unas 300 personas.
El volcán ha tenido 15 erupciones en la última década y Filipinas sigue siendo una de las zonas más vulnerables del mundo debido a su ubicación en el 'Anillo de Fuego del Pacífico', un área de alta actividad sísmica y volcánica.