El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, oficializó en su primer día de regreso a la Casa Blanca la retirada del país de la Organización Mundial de la Salud (OMS), una decisión que se hará efectiva en los próximos doce meses.
Según la orden ejecutiva firmada, la medida responde al supuesto mal manejo de la organización en crisis sanitarias globales, incluyendo la pandemia de covid-19, y su falta de reformas internas necesarias.
Trump argumentó que la OMS no ha demostrado independencia frente a la influencia política de algunos Estados miembros y criticó los "pagos injustamente onerosos" exigidos a Estados Unidos. "Esa es una gran razón", afirmó mientras firmaba el documento.
Asimismo, el mandatario reactivó una de sus políticas más controvertidas: la salida del Acuerdo de París sobre cambio climático. En su orden ejecutiva, reafirmó su postura en contra del tratado, al que calificó de perjudicial para la economía estadounidense.
Antes de esta decisión, Naciones Unidas había instado a Estados Unidos a mantener su papel de liderazgo ambiental. "Los esfuerzos colectivos del Acuerdo de París han tenido impacto, pero debemos avanzar más rápido y unidos", declaró un portavoz de la ONU.
Durante su primer mandato, Trump intentó ejecutar ambas salidas, pero su derrota en las elecciones presidenciales de 2020 impidió que se concretaran. Ahora, estas medidas regresan como parte de sus prioridades políticas.