El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este miércoles que firmará una orden ejecutiva para que el Pentágono habilite 30,000 camas en la base naval de Guantánamo (Cuba) con el objetivo de detener a inmigrantes indocumentados.
“Tendremos 30 mil camas en Guantánamo para detener a los peores inmigrantes ilegales criminales que son una amenaza para el pueblo estadounidense", afirmó Trump en la Casa Blanca, durante la firma de una ley contra migrantes con delitos menores.
El presidente también destacó que “algunos son tan peligrosos que ni siquiera confiamos en sus países de origen para que se los queden, porque no queremos que regresen. Así que los enviaremos a Guantánamo”. Añadió que “es un lugar duro. Es un lugar del que es difícil salir”.
En la base de Guantánamo, el Pentágono opera un centro de detención para inmigrantes, distinto de la prisión que alberga a sospechosos de terrorismo. Este centro recibe principalmente a migrantes interceptados en el mar, principalmente de Cuba y Haití.
Entre 2020 y 2023, la población migrante en la base fue baja, con solo 37 personas alojadas, según datos de The New York Times.
Guantánamo se encuentra en un vacío jurídico, sin las mismas garantías legales que rigen en el territorio continental de Estados Unidos. La situación en las instalaciones ha sido históricamente poco transparente, con escasa información pública sobre lo que sucede allí.
Un reportaje de The New York Times, publicado en septiembre de 2024, reveló condiciones precarias para los detenidos, como el uso de gafas de visión opaca durante los traslados, monitoreo de llamadas con abogados y denuncias de infestación de ratas en algunas áreas del centro.