Un juez federal rechazó el lunes una petición de Associated Press (AP) para restablecer el acceso de sus periodistas a la Casa Blanca, luego de que el gobierno de Donald Trump les prohibiera la entrada tras su negativa a referirse al Golfo de México con el nuevo nombre propuesto por el mandatario.
El juez Trevor McFadden, designado por Trump, negó la solicitud de una medida cautelar que permitiría a los reporteros de AP volver a ingresar a la Oficina Oval y al Air Force One.
Argumentó que las restricciones impuestas en áreas más privadas de la Casa Blanca no son comparables con otros casos donde los tribunales han protegido el acceso de los periodistas.
“No puedo decir que AP haya demostrado una probabilidad de éxito en este caso”, afirmó McFadden.
La agencia de noticias demandó a tres asesores clave del expresidente el viernes, alegando que la prohibición viola la Primera Enmienda, que protege la libertad de prensa. Sus abogados argumentaron que el gobierno no puede condicionar la cobertura periodística ni influir en el lenguaje utilizado por los medios.
Por su parte, la administración de Trump defendió la medida en documentos judiciales, asegurando que AP no tiene un “derecho constitucional” a un acceso especial al presidente. Steven Cheung, director de Comunicaciones de la Casa Blanca, calificó la demanda como un “truco de relaciones públicas”.
La secretaria de prensa, Karoline Leavitt, también respaldó la decisión del gobierno, afirmando en un evento político que están seguros de su postura. Mientras tanto, los otros dos funcionarios nombrados en la demanda, Susan Wiles y Taylor Budowich, no han emitido declaraciones.
El conflicto surgió tras la firma de un decreto por parte de Trump el mes pasado, ordenando que el Golfo de México fuera rebautizado como Golfo de América.
AP se negó a adoptar el nuevo término en sus publicaciones, lo que llevó a la Casa Blanca a revocar el acceso de sus reporteros a eventos clave.
La Asociación de Corresponsales de la Casa Blanca respaldó a AP en un escrito legal, advirtiendo que esta restricción afectará la cobertura informativa del presidente y perjudicará el derecho del público a estar informado. Reuters también expresó su apoyo a AP en un comunicado.