El Gobierno de China expresó su rechazo a los "aranceles arbitrarios" impuestos por Estados Unidos, especialmente hacia sus productos, y acusó a la Administración de Donald Trump de "responder al bien con el mal".
Durante una rueda de prensa, el ministro de Exteriores chino, Wang Yi, afirmó que "China ha estado ayudando a Estados Unidos de diversas maneras por razones humanitarias. Estados Unidos no debe devolver el bien con el mal, ni siquiera imponer aranceles arbitrarios a los productos chinos. Ningún país importante responsable debería hacer eso".
Wang también defendió las políticas antinarcóticos de China, destacando que el país "siempre toma medidas resueltas contra el tráfico y la fabricación de drogas, y ha puesto en marcha las políticas antinarcóticos más duras y completas del mundo actual".
En relación con el abuso de fentanilo en Estados Unidos, expresó que "es un problema que debe ser enfrentado y resuelto por la propia Casa Blanca".
El jefe de la diplomacia china instó a Washington a reflexionar sobre los resultados de las guerras arancelarias y comerciales.
"¿Se ha ampliado o reducido su déficit comercial? ¿Su industria se ha vuelto más o menos competitiva? ¿Ha subido o bajado la inflación estadounidense? ¿Ha mejorado o empeorado la vida de su gente?", cuestionó.
Wang subrayó que las relaciones comerciales entre ambos países se basan en interacciones "recíprocas y bidireccionales" y destacó que la cooperación puede traer beneficios mutuos. "China definitivamente tomará contramedidas en respuesta a la presión arbitraria", aseguró.
El ministro también insistió en la importancia del "respeto mutuo" en las relaciones internacionales, advirtiendo que "ningún país debe fantasear con que puede reprimir a China y, al mismo tiempo, mantener buenas relaciones".
Según Wang, "tales actos de doble rasero no son buenos para la estabilidad de las relaciones bilaterales ni para fomentar la confianza mutua". En este sentido, recordó que ambos países deben buscar la "coexistencia pacífica", como lo señaló el presidente chino, Xi Jinping, en una conversación con Trump a principios de este año.
"La confrontación y el conflicto no deben ser una opción", afirmó Xi.
El ministro de Exteriores también abordó los lazos con la Unión Europea, destacando que, tras 50 años de relación bilateral, una "relación sana y estable" beneficiaría a ambas partes y contribuiría a hacer el mundo "más brillante".
"En esta relación que dura medio siglo, el activo más valioso es el respeto mutuo, el impulso más poderoso es el beneficio mutuo, el mayor consenso unificador es el multilateralismo y la caracterización más precisa es la de socios de cooperación", expresó Wang.
Finalmente, subrayó que China y la UE, juntas, representan más de un tercio de la economía mundial, por lo que la cooperación entre ambas partes tiene un "mayor valor estratégico e influencia global". "En las últimas cinco décadas, la cooperación entre China y la UE ha avanzado mucho", concluyó.