El Gobierno de Israel anunció que aceptó la invitación de los mediadores estadounidenses y enviará una delegación a Doha este lunes para participar en conversaciones sobre el alto al fuego en Gaza.
Según un breve comunicado emitido el sábado por la oficina del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, “Israel ha aceptado la invitación de los mediadores de Estados Unidos y enviará una delegación a Doha el lunes con la intención de avanzar en las negociaciones”.
Esta noticia llega luego de que el grupo islamista Hamás informara sobre “señales positivas” en las negociaciones indirectas con Israel para mantener el acuerdo de alto al fuego en Gaza y avanzar hacia la segunda fase, tal como señaló uno de sus portavoces, Abdul Latif al Qanou.
El portavoz indicó en un comunicado que “continúan los esfuerzos de los mediadores egipcios y cataríes para completar la implementación del acuerdo de alto al fuego y comenzar las negociaciones de la segunda fase, y los indicadores son positivos”.
Sin embargo, un “funcionario israelí” anónimo declaró poco después que Israel no ha observado avances en las negociaciones. En respuesta, Hamás emitió un comunicado el domingo pidiendo el inicio “inmediato” de las conversaciones para la segunda fase del acuerdo de alto al fuego en Gaza.
El grupo también informó que su delegación había mantenido conversaciones en El Cairo con el jefe de la agencia general de inteligencia egipcia, Hassan Mahmoud Rashad, sobre el alto al fuego en Gaza y el acuerdo de rehenes por prisioneros en todas sus fases.
La segunda fase del acuerdo, que debió comenzar el 1 de marzo, implica la retirada total del Ejército israelí de Gaza a cambio de la entrega del resto de los rehenes vivos en el enclave, conforme a lo acordado con Israel en enero.
Hamás ha insistido durante la última semana en su compromiso de avanzar hacia esta fase, ante el aparente estancamiento de las negociaciones indirectas con Israel.
Por su parte, Israel ha solicitado un nuevo acuerdo para extender la tregua durante el Ramadán y la Pascua judía a cambio de la liberación de los rehenes restantes, sin retirar sus tropas de Gaza.
Además, el domingo, las autoridades israelíes suspendieron la entrada de ayuda humanitaria a Gaza, lo que fue calificado por Hamás como un “chantaje barato”.
El grupo recordó que la falta de ayuda afecta no solo a la población de Gaza, devastada por más de un año de bombardeos israelíes, sino también a los rehenes israelíes que aún permanecen en el enclave.
En la primera fase del acuerdo de alto al fuego, que concluyó el 1 de marzo tras 42 días, fueron liberados 33 rehenes, de los cuales 8 estaban muertos, a cambio de casi 1,800 prisioneros palestinos. Actualmente, 59 rehenes permanecen en Gaza, de los cuales el Ejército israelí estima que 35 están muertos.
Hamás lanzó un ataque contra Israel el 7 de octubre de 2023, matando a unas 1,200 personas y capturando a 251. En respuesta, Israel invadió Gaza, donde ha matado a más de 48,000 personas y destruido gran parte del enclave.