La Casa Blanca anunció este martes que Ucrania y Rusia han acordado suspender durante 30 días los ataques a sus infraestructuras energéticas, como parte de dos acuerdos mediados por Estados Unidos. Además, ambos países han aceptado un alto el fuego en el mar Negro. Esta decisión sigue a varias reuniones celebradas en Riad, Arabia Saudí, entre delegaciones de Estados Unidos, Rusia y Ucrania.
El ministro de Defensa ucraniano, Rustem Umerov, confirmó que Ucrania apoya los acuerdos, aunque advirtió que cualquier movimiento de buques de guerra rusos fuera del este del mar Negro será considerado una violación de los pactos, lo que le daría derecho a Ucrania a la autodefensa.
El acuerdo incluye una ayuda de EE.UU. para facilitar el levantamiento de las sanciones sobre las exportaciones agrícolas y de fertilizantes rusos. Además, la Casa Blanca expresó su compromiso en continuar trabajando por una paz duradera, y destacó los esfuerzos para el intercambio de prisioneros y la liberación de civiles ucranianos detenidos por Rusia.
En las últimas horas, las negociaciones en Arabia Saudí también han tratado sobre la seguridad de la navegación en el mar Negro. Aunque Moscú había mostrado reticencias a la tregua, las conversaciones avanzaron bajo condiciones estrictas, como la inspección de los buques para evitar el transporte de armas.
La ONU y otros países se sumarán a la mesa de diálogo en el futuro, según informó uno de los representantes rusos, Grigori Karasin.
Mientras tanto, el presidente ucraniano Volodímir Zelenski se reunirá con el presidente francés Emmanuel Macron este miércoles, con miras a una cumbre en la que se discutirán nuevos pasos para abordar la guerra en Ucrania.