El auge de los tacos mexicanos en Estados Unidos llegó a las aulas de la Universidad de Kentucky, donde alrededor de 30 estudiantes, en su mayoría anglosajones, estudiaron cómo este plato está ayudando a los inmigrantes a integrarse a la sociedad estadounidense.
“No es solo una clase sobre comida, sino sobre su conexión con la cultura, la literatura, la inmigración. ¡Tacos para pensar!”, explicó a Efe Steven Álvarez, profesor encargado del curso, que se dicta cuando el estado de Kentucky ve crecer su población hispana y mexicana.
La idea de llevar la comida mexicana a un entorno académico rondó por años la cabeza de Álvarez y esta primavera vio plasmada su tentativa de la mano del Departamento de Escritura, Retórica y Estudios Digitales de dicha universidad, que propuso el curso “Taco Alfabetización: Promoción Pública y comida mexicana en el Sur de EU”.
La asignatura logró un lleno total a la hora de las inscripciones y varios alumnos interesados se quedaron por fuera, con la particularidad de que tan solo tres de los 30 estudiantes son de origen hispano, dos de ascendencia mexicana y el otro con raíces panameñas.
“Ha sido una gran experiencia ver cómo estos estudiantes, la mayoría blancos, lograron escribir sobre una cultura partiendo de una de sus comidas más representativas”, indicó Álvarez, nacido en Arizona y de padres mexicanos.
El primer día del curso, centrado en la enseñanza de la escritura, los estudiantes redactaron sus experiencias sobre su comida mexicana favorita, lo que sirvió al profesor para reafirmar la popularidad de los tacos entre los jóvenes, sin importar si son inmigrantes.
Los estudiantes escogieron luego un tema relacionado con los tacos para escribir un proyecto de carácter social, político y cultural, que dio pie a ejemplos de integración como la propuesta de una estudiante de Los Ángeles de origen coreano, que “está investigando y escribiendo sobre Ta-Corea, una fusión entre dos comidas, dos culturas”, según explicó Álvarez.
Como es de esperar, este curso ha contado con la participación de profesionales como Patricia Ramírez, propietaria de Tortillería y Taquería Ramírez, en Lexington, Kentucky, y cuyo caso sirvió de reflejo de la lucha que despliega la comunidad inmigrante en Estados Unidos.
“Estaba muy nerviosa, yo nunca había estado frente a unos estudiantes universitarios, pero estos ‘chamacos’ me sorprendieron con sus preguntas y su interés”, relató a Efe la inmigrante de Guadalajara, México, y que emigró a EU hace 32 años.
“Les conté mi historia, que habíamos traído la máquina de hacer tortillas desde México y cómo todo lo hacíamos a mano nosotros mismos, con productos frescos”, señaló.
El estudio de los tacos no solo se limitó al salón de clases, ya que los estudiantes hicieron un recorrido por restaurantes y taquerías de un sector de Lexington, conocido ahora como “Mexington”.
“Históricamente existía el estereotipo que la comida mexicana no era saludable, esto está cambiando”, aseguró a Efe Gustavo Arellano, autor del libro “TACO US: Como la comida mexicana conquistó América”.
Para el escritor, también invitado a la clase, el hecho de que el curso se dicte en un estado sureño como Kentucky, donde la comunidad mexicana es de bajos recursos, demuestra el lugar que están ganando los inmigrantes.
“Por lo general, las culturas dominantes menosprecian la comida de los dominados, pero aquí ya no está pasando y eso es muy bueno”, afirmó.
Además del libro de Arellano, los estudiantes tuvieron que leer otros textos que abordan desde una perspectiva cultural y social el auge del taco mexicano en Estados Unidos y el mundo.
El curso generó tal aceptación que a estas alturas tiene asegurada su permanencia para la primavera de 2017. Al mismo tiempo, Ramírez confiesa haber ganado nuevos clientes entre los estudiantes que escucharon su conferencia.
“Vienen muy seguido, son muy amables y lo más importante: les gustan los tacos que aquí preparamos”, indicó. EFE