El aparato estaba en una casa de la colonia Otilio Montaño de Jiutepec; hace meses, la madre del menor se lo encargó a su hermana y al hombre, que está preso desde febrero.
Jiutepec.- Un niño de cuatro años de edad fue encontrado sin vida dentro de un refrigerador, la mañana del martes, en una casa que está ubicada en la colonia Otilio Montaño de este municipio.
El menor habría sido asesinado a golpes por un tío, quien además lo quemó en el patio de su casa, en complicidad con su pareja sentimental.
Al respecto, la Fiscalía General del Estado (FGE) informó que en septiembre de 2018, la madre de dos menores –de cuatro y cinco años– le encargó a su hermana que los cuidara.
Los infantes se quedaron en una vivienda de la colonia Otilio Montaño de Jiutepec, donde la tía vive con su pareja y dos infantes, que son hijos de ambos.
En noviembre, los dos adultos le dijeron a la madre de los niños que mientras caminaban por la colonia La Joya de Yautepec, en compañía de los cuatro niños, fueron interceptados por tres individuos que presuntamente se llevaron consigo al menor de cuatro años.
Sin embargo, el hermano del menor desaparecido le contó a su abuela materna que su tío, identificado como Arturo “N”, golpeó al otro niño y ello le provocó sangrando por la boca y oídos.
Ante ello, los tíos le prendieron fuego en el patio de la casa. Por tal motivo, fue iniciada la denuncia correspondiente.
Después, Arturo “N” y Karina Guadalupe “N” fueron aprehendidos por agentes de la Policía de Investigación Criminal.
En febrero, un juez determinó vincular a proceso penal a estas personas por el delito de desaparición de personas por particulares, manteniendo para ellos la Prisión preventiva. Sin embargo, seguían sin dar a conocer el paradero del niño.
De acuerdo con información de fuentes consultadas por La Unión de Morelos en la zona del hallazgo, un hombre comentó que, en enero, “Arturo le pidió a su vecino que le guardara un frigobar. Así que lo pusieron en la entrada de la cochera”.
Hasta la fecha, el refrigerador continuaba en el referido sitio. Pero este lunes, la familia intentó moverlo debido a que pretendía hacer mejoras en la casa.
En ese momento, los moradores de la vivienda se percataron de que había algo dentro del refrigerador que sonó durante las maniobras, pero no lo quisieron abrir.
Por tal motivo, llamaron al Ministerio Público y a la FGE para que investigaran el contenido.
La mañana del martes llegó personal de la Fiscalía General del Estado a la vivienda marcada con el número 98 de la calle 21 de Marzo de la colonia Otilio Montaño.
Al ingresar, en el patio vieron un refrigerador cubierto con plástico, cartón y atado con tres lazos. Al abrirlo, descubrieron bolsas negras y percibieron un olor fétido.
En seguida, los peritos revisaron el contenido de las bolsas y descubrieron que se trataba de los restos del niño de cuatro años.
Los agentes de la Policía de Investigación Criminal que se encontraban en el sitio fueron informados que el dueño del refrigerador es Arturo “N”, quien es investigado por la desaparición de su sobrino.
A las 12:40 horas, los peritos concluyeron las pesquisas. Diez minutos después llegó la unidad del Servicio Médico Forense.
Los camilleros de la fiscalía sacaron el cuerpo del menor y el aparato electrodoméstico, que quedó a cargo de las autoridades.