En el lugar de los hechos, una de las afectadas murió al recibir al menos 10 cuchilladas, mientras que su compañera se encuentra grave en el hospital.

Una llamada anónima se registró al sistema de emergencias 066 alrededor de las 07:20 horas de ayer sábado, solicitando el apoyo de una ambulancia en la avenida Jesús H. Preciado de la colonia San Antón, ya que dos personas estaban lesionadas.

A la mencionada dirección llegaron los paramédicos, quienes observaron a un grupo de individuos que se encontraban afuera del condominio denominado “San Antón”.

Los ahí presentes comentaron que en el interior del departamento 112, en el edificio 1, estaban dos mujeres heridas.

Al ingresar al departamento, los socorristas le brindaron los primeros auxilios a Cristina Bailón Segura, quien presentaba heridas en el pecho y el abdomen.

Debido a su delicado estado de salud la afectada fue llevada de emergencia al hospital.

Asimismo en la sala estaba muerta una mujer de nombre Karina Martínez Bautista de 23 años de edad, quien tenía heridas en el pecho, el abdomen y las piernas.

A la escena del crimen llegó el personal de la Procuraduría General de Justicia (PGJ) para realizar las investigaciones.

Los peritos al revisar la morada encontraron un cuchillo, una cobija ensangrentada, dos botellas de bebidas alcohólicas, tres bolsos con dinero y un radio de comunicación Nextel.

En relación a los hechos, los vecinos comentaron que escucharon ruidos en el tercer piso del edificio en donde había cinco personas.

A los pocos minutos, una mujer tocó la puerta de uno de los departamentos para pedir ayuda, pero los moradores no le quisieron abrir para evitar problemas.

La agraviada corrió hasta la planta baja, en donde fue alcanzada por su agresor, quien la golpeó y la obligó a subir al departamento 112.

Por temor a represalias, los testigos presenciales no quisieron proporcionar más datos.

Él o los responsables del homicidio lograron huir con rumbo desconocido.

Cabe destacar que en la pared del primer piso del edificio y en las escaleras hasta la entrada del departamento en donde sucedió el homicidio, quedaron manchas de sangre.