Fue en los campos de Chontepec del ejido de Tlalnepantla, en donde vecinos del lugar reportaron a las autoridades la existencia de una persona sin vida.
Los habitantes informaron que tras percibir un fétido olor a putrefacción se adentraron en el lugar y hallaron el cuerpo.
Al lugar se trasladaron elementos de la Policía Municipal, quienes tras confirmar la existencia del cadáver, informaron a la Subprocuraduría de la Región Oriente.
Ésta a su vez envió policías ministeriales y peritos a realizar las investigaciones correspondientes.
Los primeros reportes indicaron que el finado no contaba con brazos, así como tampoco con la piel del rostro, la cual pudo haber sido desprendida por animales del lugar, indicó el reporte.
Se estimó que este hombre pudo haber sido asesinado entre unas 36 y 48 horas previas a su hallazgo.
Finalmente se informó que el occiso vestía una camisa color amarillo, un pantalón de vestir color negro y calzaba zapatos color café.
El levantamiento de cadáver se efectuó a las 11:11 de la noche y los hechos fueron integrados al expediente YA-UIDD-A/1665/2012; minutos después la movilización del personal de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) de Morelos se retiró del sitio.