El primer hecho ocurrió a las cuatro de la tarde del lunes, en una casa ubicada en la avenida Subida a Chalma, de la colonia Lomas de Tetela.
Dentro de la propiedad estaban los cuerpos sin vida de Alfredo Rosas Sánchez de 47 años de edad y Juan Antonio Lozada de 56 años, quienes murieron asfixiados.
Ambas personas tenían el rostro cubierto con un pedazo de tela, así como las manos y los pies amarrados.
Sobre este hecho había una tercera persona que logró escapar de sus secuestrados y fue quien dio parte a la Policía.
La Procuraduría General de Justicia (PGJ) informó que Alfredo Rosas era el dueño de la morada, la cual ya había vendido y recibió cierta cantidad de dinero por ella.
Era el inicio de la ola de violencia, ya que minutos después, un solitario sujeto mató a balazos a un hombre de 27 años de edad, en la calle Prolongación Lauro Ortega, de la colonia Lomas de Cortés, del municipio de Cuernavaca.
La víctima se llamaba Juan Carlos Flores Ortiz que fue asesinado por impactos de bala calibre .9 milímetros.
A pesar del operativo que implementaron los policías, no lograron localizar al responsable.
El cuarto homicidio sucedió a las diez de la noche, en el conjunto habitacional “Maravillas”, del poblado de Ocotepec.
En la casa marcada con el número uno se encontraba la víctima de nombre Eduardo Muñoz Pérez de 53 años de edad, administrador de dicho conjunto de 15 casas.
En la cama estaba el occiso desnudo, el cual presentaba golpes y heridas ocasionadas con un arma punzo cortante.
En otro caso, un grupo armado ingresó al bar “La Oficina 2” ubicado en la colonia Ejidos de Acapantzingo, del municipio de Cuernavaca.
Durante el ataque a tiros murieron Jorge Esteban Salazar de 66 años y Gonzalo Martínez Cruz de 38 años.
En la escena del crimen quedaron regados siete casquillos calibre 7.62 y una cartulina con un mensaje firmado por la organización delictiva “Guerreros Unidos”.
Ya en el transcurso de la madrugada del martes, en la calle Juan Álvarez de la colonia El Empleado, del municipio de Cuernavaca, asesinaron a balazos a Alfonso Hernández Giles.
En el lugar de los hechos los peritos recogieron tres casquillos nueve milímetros.
Hernández Giles de 32 años de edad, tenía su domicilio en la calle Gutemberg, de la colonia Centro de Cuernavaca.
Los muertos número ocho y nueve fueron dos hombres acribillados a tiros alrededor de las tres de la madrugada en el poblado de Ahuatepec, a la altura del Centro de Salud.
El primero de los occisos vestía playera gris, pantalón de mezclilla azul y botas negras. El segundo finado llevaba chamarra negra de piel, playera negra, pantalón de mezclilla y botas café.
En el lugar se localizaron 17 casquillos percutidos, ocho .9 milímetros, nueve 7.62 y un cartucho útil calibre .9 milímetros.
Y para terminar los hechos violentos, en un camino de terracería conocido como “Amapola” de la colonia Villa Santiago, del poblado de Ahuatepec, fue encontrado el cuerpo sin vida de un individuo de 30 años de edad aproximadamente.
El finado que estaba amarrado de los pies con cinta canela vestía playera blanca, pantalón de vestir negro, bóxer rojo y calcetines grises.
Los peritos recogieron tres casquillos calibre 7.62, 16 casquillos calibre .9 milímetros, dos cartuchos útiles .9 milímetros.