El propietario del establecimiento, que está ubicado en la calle Arteaga de la referida colonia, se percató del atraco la mañana de ese día.
Al llegar a la farmacia se dio cuenta de que los candados habían sido forzados y que gran parte de la mercancía ya no estaba.
También hacían falta alrededor de seis mil pesos de la caja registradora y el disco de grabación de las cámaras de video vigilancia.
Ante dicha situación, la víctima llamó a la Policía local, por lo que elementos del Mando Único de la ciudad acudieron al sitio, pero poco pudieron hacer para dar con los responsables.
Hasta la tarde de este lunes no habían sido localizados. El propietario del sitio acudió al Ministerio Público para iniciar la denuncia correspondiente.